Vexel (Fani Álvarez): Mara y Gwen han contratado un Vexel, un
cuerpo sintético que funciona de soporte físico para un sistema de
transferencia de consciencia en tiempo real con el que quieren darle
a Gwen una oportunidad para recuperar su vida anterior.
Amor de espinas (Celia Añó): Nat ha tenido un encuentro que parece
de cuento. Y, sin embargo, a ella no le ha hecho ni pizca de gracia.
Ahora tiene un mago en su casa que insiste en recordarle una parte
de su adolescencia que ella ha enterrado para siempre.
Anomalía (Isabel Collazo): Las anomalías deben ser erradicadas. En
la Era de la Perfección no tienen cabida; los sentimientos se han
eliminado y el ser humano por fin ha sido mejorado. Leira no ha
dejado de huir desde hace demasiado tiempo. Ahora regresa a casa.
Por Naren. Todo ha sido siempre por ella.
La reliquia del Titán (Mar Hernández): Kaeldris ha nacido con la
bendición de los Guardianes y por tradición debe formarse en la
Escuela de los Elegidos. Detesta esta norma, así que no es un buen
estudiante. Su actitud lo enfrentará a su verdadero destino. ¿Estará
preparado para aceptarlo o abandonará al mundo?
Kalasona (Patricia Macías): Kala se considera la mejor ladrona de todo
Péndulo desde el legendario Chor Izo, pero, para que el resto del
mundo lo vea tan claro como ella, tiene que dar un gran golpe. Con
esa intención se cuela en palacio. Su plan se tuerce, sin embargo, al
conocer a Sona.
El precio de la inspiración (Ana Morán Infiesta): Cuando se ofrece
voluntaria para probar una cibermusa, Teresa confía en romper
con el bloqueo creativo y emocional en el que está sumida desde la
muerte de su mujer en un atentado. El proceso tal vez no sea tan
inocuo como ella espera.
99,9 % (Andrea Prieto Pérez): Octavia Rey es feliz. Al menos, eso dice
la aplicación y no tiene motivos para dudar. Aunque sabe que hay
algo que la haría más feliz todavía: ser la primera en escribir un buen
artículo sobre la desaparición de Belle Sanz. ¿Qué le ocurrió a la
celebridad del momento?
Lux tenebrae (Leticia S. Murga): Cuando Belén comenzó a recibir
aquellas misteriosas cartas de contenido grotesco, que le advertían
de un peligro inminente, pensó que se trataba de una broma pesada.
Era imposible que tuvieran ni una pizca de verdad? ¿o no?
Huesos de manzana (Marina Tena Tena): Carmen se ha prometido
volver a estar bien: retomar el control de su vida. Por eso va a
pasar unos días al pueblo de su padre, para desconectar y quizá
encontrarse a sí misma. Era la idea, hasta que escucha el grito en el
monte. (Y es que bajo el bosque duermen muchos secretos).